Soñadores trepando nubes

miércoles, 1 de agosto de 2012



Mucho tiempo después, Josep Verdura, el hijo de aquel obrero maldito, me lo contó. Me lo contó en Barcelona, cuando yo llegué al exilio. Me lo contó: él era un niño desesperado que quería salvar a su padre de la condenación eterna y el muy ateo, el muy tozudo, no entendía razones. - Pero papá – le dijo Josep, llorando -. Si Dios no existe, quién hizo el mundo? - Tonto — dijo el obrero, cabizbajo, casi en secreto -. Tonto. Al mundo lo hicimos nosotros, los albańiles.
E. G.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Direcciones de Calles Que No Existen